Este libro realza el aporte de las mujeres en los siglos XIX y XX, siglo este último donde surgió el movimiento feminista en México. Desde diversas actividades, algunas vedadas para ser ejercidas por las mujeres, como el periodismo, la religión y la educación, o mediante el ejercicio de la prostitución o la celebración de congresos nacionales, las mujeres configuraron nuevas formas de ser que las constituirían años después en sujetos de pleno derecho en relación a sus grandes demandas: participación e igualdad política, educación, empleo o salud.