Estudios sobre el cielo muestra de una manera esquiva y distanciada una visión personal acerca de la forma de habitar y relacionarse con la naturaleza del sujeto humano dentro de una ciudad moderna, en específico las grandes megalópolis de América Latina. Es una mirada de lo que éste construye y destruye; sus prolijidades y desprolijidades, secuencias y consecuencias; su relación con lo natural y lo sobrenatural, con el pasado y la incertidumbre de su futuro; sobre el absurdo de su misma existencia.