La obra tiene como propósito fundamental el análisis histórico crítico de la casa habitación unifamiliar durante el siglo XX en la Ciudad de México, destinada a la clase media y media alta de la capital. El objeto de estudio es principalmente la casa proyectada por arquitectos, la cual tiene un amplio registro en la sociedad y está presente en archivos, y por lo tanto su estudio resulta más veraz y documentado. También, responde a dos preguntas cruciales: ¿por qué cambiaron los espacios al interior de la casa? y ¿cómo se fueron modificando esos espacios? Las respuestas son diversas y van urdiendo las ideas en torno a la transformación de la casa, por encima de un enfoque estético o estilístico, como lo es la tecnología y los medios de comunicación, los modos de vida, el consumismo, la globalización, la ecología, las transformaciones de las relaciones familiares y la inseguridad de la ciudad.