Las redes digitales han modificado radicalmente la puesta en circulación de contenido y la forma en que se establecen relaciones dentro y fuera del campo editorial. Actualmente todos somos editores y publicar se ha vuelto una cuestión de resonancia. La autoridad de la academia, el museo o los periódicos se traslada a un espacio de negociación permanente con los campos del trabajo, las finanzas y la puesta en circulación de contenido en ejercicios permanentes de traducción. La publicación contingente producen nuevos sistemas de relaciones en redes de puesta en circulación de contenido digital o impreso.
Estos tres ensayos piensan al libro como un medio político que “puede utilizarse para cuestionar, intervenir y perturbar prácticas e instituciones existentes e incluso ofrecer alternativas radicales y contrainstitucionales.